0010101001

Bienvenidos al "blog de un jugador". En él realizo descripciones detalladas de una buena variedad de videojuegos. Todas estas descripciones son obra propia y no copiadas de ningún sitio, aunque para ilustrar en algunos de ellos imágenes me he visto forzado a copiarlas de otro sitio.

jueves, 26 de enero de 2017

UNMECHANICAL EXTENDED

De nuevo un juego de ps3, llamado Unmechanical extended. Un montón de puzzles a resolver van a ser el tema central de este juego.
Imagen extraída de wikipedia.com
La historia es bastante simple, ya que ni siquiera tiene diálogos de ningún tipo. Unos robots voladores van tranquilamente flotando por ahí hasta que una especie de tubo traga a uno de ellos. Ahora ese robot, controlado por nosotros, debe intentar volver a la superficie.

Y así sin más ya estamos al mando del robotejo. Sus controles también son simples, ya que aparte de movernos en las distintas direcciones tan sólo hay un único botón para recoger y arrastrar objetos.
Imagen extraída de 3djuegos.com
El primer puzzle lo comprende unas rocas bloqueando el camino. Obviamente el juego ya nos ha enseñado previamente que botón debemos pulsar, así que esto es casi más una prueba de control que de un puzzle. El siguiente puzzle consiste en mover una palanca, que se hará de manera similar. De nuevo, esto no cuenta como puzzle en si, pero es la antesala ya que el 90% del juego (si no es más) consiste en mover cosas arrastrándolas por la pantalla o moviendo palancas.

Poco a poco los puzzles se irán complicando, pero siempre de una manera gradual. Empezará con un botón que pulsarlo abrirá la puerta a la siguiente pantalla, pero se cerrará en cuanto dejemos de presionarlo, forzándonos a buscar algún objeto que posar encima del mismo.

Pronto nos toparemos con el primer puzzle en si. Tirando de un dispositivo una bola roja sale despedida cayendo por un tubo. Todo pasa demasiado rápido así que no podemos recogerla. Más adelante habrá un nuevo botón que pulsar, pero el acceso a él es tan estrecho que no cabemos, ni tampoco las piedras que hay por el camino.
Imagen extraída de 3djuegos.com
Así, posaremos una de las piedras en el camino de la bola roja para que esta no se cuele por el tubo, y usaremos dicha bola en el botón y, ¡voila¡ puzzle resuelto. Claro está, que a duras penas cinco minutos del juego esto se saca con facilidad, pero aún así es muy probable que tiremos del dispositivo, veamos la bola pasar y no tengamos muy claro que estás pasando.

Y es que la gran mayoría de los puzzles tienen algo en común: primero pulsaremos los botones o tiraremos de las palancas para ver que hacen. Una vez que tenemos esa información sopesaremos la manera de solucionar el puzzle y, si no parece posible, exploraremos el escenario en busca de otros elementos que sean la clave del mismo.
Imagen extraída de 3djuegos.com
Aún con una falta de una historia o de pantallas de transición, el juego ofrece puzzles que no son tan fáciles cómo para solucionarlos a la primera pero tampoco injustos. En la gran mayoría de los casos nos detendremos algunos minutos mientras pensamos la solución y, cuando esta nos viene a la cabeza y comprobamos que, efectivamente, estábamos en lo cierto, es una grata sensación.

Visualmente el juego es bastante interesante, aunque muchas veces es oscuro y no siempre resulta fácil ver esa piedra o esa barra de hierro que nos hace falta para pulsar este o aquel botón. Otras veces el fondo está muy vivo y resulta agradable de ver.

No hay modo de perder ni morir. Si un objeto es clave para resolver un puzzle cosas como el agua lo harán flotar (en contraposición a piedras que se hundirán) o bien ciertas barreras bloquearán el paso de objetos de una zona a otra. Esto también implica que no hay enemigos; lo máximo que podemos topar son explosivos que, si no los usamos correctamente, debemos volver a pulsar el botón o palanca para crear uno nuevo sin más.
Imagen extraída de 3djuegos.com
Esta versión incluye una historia a mayores a modo de DLC. La historia inicial es muy parecida pero ahora hay incluidos dos robots, separándose por el camino pero con el mismo objetivo: salir a la superficie.

Desgraciadamente los puzzles en este DLC se sienten un poco menos satisfactorios. En líneas generales aún sabiendo la solución del puzzle nos llevará un tiempo realizarlo, dándonos una sensación completamente distinta al juego principal. Esto puede incluir algunos puzzles en los que la velocidad y el tiempo de reacción son más importantes que la solución en si.

Si bien es verdad que añade nuevos tipos de puzzles y algunos de ellos si que resultan interesantes e incluso alguna nueva mecánica, como perder la facultad de volar temporalmente. En este caso habrá que buscarse la vida para poder resolver ese puzzle que, volando, sería fácil de resolver.
Imagen extraída de 3djuegos.com
También se añade alguna otra mecánica que implica dos robots en acción, si bien sólo controlamos a uno, ciertas acciones o movidas de palancas harán que nuestro compañero pueda realizar las suyas, significando así el poder progresar en el juego.

En general no hay mucho más que decir. Un puzzle tras otro pero que no llega nunca a hacerse pesado, ya que la diversidad y el no estar atascado demasiado rato en cada uno de ellos ayuda a estar progresando continuamente.
RESUMEN:

Juego: Unmechanical Extended

Género: Puzzles

Pros: Los puzzles se van volviendo más difíciles de manera progresiva, ayudando así a mantener el flujo de dificultad y de aprendizaje. Todos los puzzles a resolver requieren comprobar que hacen los botones o palancas y observar el entorno; luego, cuando la solución nos viene a nuestra cabeza y la aplicamos, eso nos ofrece satisfacción.

Contras: Si bien la DLC ofrece algunas mecánicas nuevas e interesantes, hay ciertos puzzles que al final sentimos que fue casi más la suerte (de hacer o haber visto X cosa) que de nuestra propia cabeza pensante.

jueves, 12 de enero de 2017

HELL YEAH!: LA FURIA DEL CONEJO MUERTO

A continuación trataré sobre un juego con un estilo de manejo y visual bastante simple. Con tan sólo dos dimensiones y una trama de lo más absurda tenemos frente a nosotros un juego de la ps3 llamado Hell Yeah: La furia del conejo muerto.
Imagen extraída de wikipedia
La historia comienza con la presentación de Ash, príncipe del infierno. Al terminarse el reinado de su padre ahora Ash lleva una buena vida: tiranía, maltrato de monstruos y todo lo que un nuevo rey podría desear. Sin embargo, este tiene un pequeño secretito, y es que cuando se mete a bañarse le acompaña su querido patito de goma.

Una cámara indiscreta le saca una foto y esta pronto acaba en internet con 100 vistas. Ash, enfurecido decide iniciar la búsqueda de esos 100 monstruos que han visto la foto, matarlos y recuperar las fotos.

Así tomamos el control del personaje, similar al de cualquier juego de plataformas. Sin embargo eso no va a durar; tras algunos diálogos cual tutorial, pronto se nos concederá el arma definitiva que usaremos durante prácticamente todo el juego, una sierra.
Imagen extraída de gamespot.com
Montados en una silla y todo a nuestro alrededor es una gran rueda de sierra. Desplazarnos y saltar será lo más importante, pero además hay un botón que hará girarla más rápidamente y que servirá para despedazar a los distintos enemigos que pueblan el escenario, aún cundo a algunos de ellos bastará con chocarse contra ellos para eliminarlos.

Pronto nos toparemos con 1 de esos 100 monstruos que han visto la foto. Este monstruo posee una motosierra en la parte superior y, puesto que se encuentra casi bajo tierra, resulta imposible del todo golpearle. Tratar de atacarle significará recibir un impacto y perder una cantidad de salud, así que para eliminarle habrá que ir por otra zona que nos haga aparecer a un lateral, donde es más vulnerable.
Imagen extraída de gamespot.com
Una vez que hayamos hecho eso, el juego mostrará un pequeño minijuegos, y es que cada vez que tengamos que matar a un monstruo habrá que superar uno antes de eliminarlo satisfactoriamente. Estos consisten en pequeñas tareas, tales como pulsar un botón un número determinado de veces, presionar ciertos botones a modo de “Quick time event”, o mantener un botón pulsado en momentos concretos, por ejemplo.

Los primeros monstruos serán eliminados por el contacto físico, pero pronto habrá otros que estarán rodeados de pinchos u otros peligros y no será posible matarlos de esa manera; por ello Ash se va a equipar de armas, ya sea misiles, ametralladoras, escopetas... algunas de estas se consiguen cómo parte de la historia, mientras que otras hay que comprarlas en la tienda.
Imagen extraída de gamespot.com
Moviendo la palanca apuntaremos hacia donde queremos disparar. Esto va a ser importante ya que una vez que tengamos al menos un arma de fuego en nuestro control, prácticamente el resto del juego habrá que usarla con los monstruos principales y con otros enemigos menores.

Cuando hayamos vencido a un monstruo podemos leer su entrada en uno de los submenús del juego. El texto que se incluye nos dará a conocer la historia que hay detrás del monstruo, o sus aficiones o... a veces son simplemente textos hilarantes que, cómo mínimo, nos harán sacar una sonrisa.

Las tiendas del juego no varían mucho; bien puede ofrecernos algunas de las armas mencionadas, o bien mejoras de salud, protegernos de los golpes... y otras cosas más basadas en los ornamentos ya sea modificando el tipo de sierra que estamos usando o la cabeza de nuestro protagonista (cascos, peinados...).
Imagen extraída de gamespot.com
Cada poco tiempo unas puertas nos bloquearán el camino: estas requieren de eliminar a un número determinado de monstruos para ir avanzando. Normalmente entre puerta y puerta la diferencia de monstruos a eliminar es muy baja; raro es la vez que tengamos que explorar demasiado la zona porque nos hayamos dejado algún monstruo vivo (para lo que contamos con un radar que ayuda bastante en esta tarea).

Una vez eliminado un buen número de monstruos nos toparemos con un jefe final. El jefe suele tener su propio escenario de combate y un patrón de movimiento y disparos predeterminado. Al dañarle un cuarto de vida el escenario cambiará ligeramente y con él el patrón de ataque del mismo jefe. Obviamente estos jefes también cuentan cómo parte de los 100 monstruos que Ash debe matar.
Imagen extraída de gamespot.com
Si bien la mayor parte del tiempo vamos montados en nuestro vehículo-sierra, ciertos momentos nos obligarán a ir caminando sobre nuestras dos patas, viajar al espacio en una nave o bajo el mar con un submarino. Estos momentos son concretos, por lo que le darán un poco de frescura evitando la monotonía.

Todos los monstruos que hayamos derrotado (entiéndase los 100 principales) irán a parar a “la isla”, accesible desde el menú principal. La isla es un lugar idílico, un paraíso... para Ash al menos, ya que obligaremos a trabajos forzados a los distintos monstruos. Asignando los monstruos se nos puede ofrecer dinero extra, más salud o a veces objetos nuevos.
Imagen extraída de gamespot.com
Esto llevará su tiempo, por lo que con los monstruos que hayamos puesto a trabajar se quedarán en sus respectivos sitios, efectuando ciertas tareas para ganar, a la larga, esas ventajas. Por ello podemos volver al juego principal y dejarlos ahí; con el tiempo y, cuando volvamos a entrar en la isla, se nos avisará que hay algunos premios para recoger.

Ocasionalmente los monstruos se enfadarán o se estresarán; hará falta trasladarlos a la sala de tortura para darles un poco de disciplina o a la playa para que se relajen un poco. Tan pronto como se recuperen pueden volver al trabajo. De nuevo, esto ocurre a la larga, siendo aconsejable echar un vistazo cada nuevo día que vayamos a poner el juego.
Imagen extraída de gamespot.com
En líneas generales el juego es bastante curioso, aunque muchas veces resulta complejo matar a los monstruos. Necesitamos saltar y a la vez mover la palanca, disparando a enemigos que a duras penas vemos en la pantalla ya que de acercarnos más los proyectiles nos acribillarán. Por culpa de eso muchas veces ni siquiera veremos del todo al monstruo en cuestión (algunos tienen un tamaño considerable, ocupando buena parte de la pantalla).

Aún así, los textos en las pantallas de carga pueden sacarnos una sonrisa, como mostrarnos el “consejo aleatorio un poco inútil” o parodias cómo el “toasty!” de Mortal Kombat.

RESUMEN:

Juego: Hell Yeah!: La furia del conejo muerto.

Género: Plataformas

Pros: Los minijuegos son pruebas muy cortas y, aunque se repitan, hay bastante variedad viendo un buen número distintos de ellos. El humor que tiene el juego, principalmente en la información de los monstruos nos puede hacer reír.

Contras: Muchos monstruos serán destruidos sin apenas visión. Algunos monstruos requieren saltar y disparar a la vez, cosa difícil ya que ambas acciones utilizan una misma mano, complicando de más algunas tareas. algunas armas que se pueden comprar tienen una gran fuerza, haciendo que al luchar contra algunos jefes todo se reduzca en matarle más rápido de lo que él pueda matarnos a nosotros.