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Bienvenidos al "blog de un jugador". En él realizo descripciones detalladas de una buena variedad de videojuegos. Todas estas descripciones son obra propia y no copiadas de ningún sitio, aunque para ilustrar en algunos de ellos imágenes me he visto forzado a copiarlas de otro sitio.

lunes, 30 de enero de 2012

4 ELEMENTS II

Alternando y sin dejar de lado el ordenador, voy a hablar de un juego de tipo puzzle, este se llama “4 elements II” o, simplemente “cuatro elementos”. Un juego no complicado de manejar pero que nos puede dar algún problema a la hora de superarlo, si bien no es excesivamente difícil hace falta un poco de cabeza y de velocidad para poder terminarlo.
Antes que nada, tenemos dos “niveles” de dificultad. En realidad son un modo “relax” y el normal: El primero de ellos consiste en tan solo jugar al juego sin ningún límite de tiempo, ideal para entretenerse un rato, desconectar, y aquellos jugadores que buscan pasarse un juego sin demasiados problemas. Por otro lado está el modo normal del juego, en el que tenemos tiempo, un tiempo que en ocasiones se nos echará encima y, en el caso de llegar a cero, nos tocará reiniciar el nivel entero.

El juego consiste, en primer lugar, en un escenario en el que debemos encontrar unos objetos que aparecen por la parte inferior de la pantalla, estando divididos en fragmentos, así si nos piden buscar un pico y una pala, estarán partidas en varios fragmentos, y debemos buscarlos en un escenario estático a base de clicks.

Una vez reunido algún objeto, hemos de usarlo en el escenario, para que así tengamos acceso a alguna otra parte de otro objeto que aún no hayamos completado y, en el caso de tenerlos todos, se nos someterá a una prueba final que, en el caso del hada de aire consiste en un simple “Simón dice”.
Superado esto y “liberado” tan mona hada, comenzará lo que es el juego en si: Una pantalla con un montón de joyas en rejilla y de cuatro colores. Con el ratón, haciendo click en una de las joyas, y arrastrando a las adyacentes que sean de su mismo color, al soltar desaparecerán, llevándose con si una parte de zona de tierra por la que el aire tiene que pasar. Claro está, que ha de haber mínimo 3 joyas iguales para poder hacerlo y, en el caso de encadenar más de 4 iguales, explotarán (cuanta más grande la cadena, más grande la explosión).

Inicialmente tenemos el aire, que está situado en alguna parte de la pantalla, y eliminando zonas de tierra que tapian el paso, hemos de librar. Claro está, que las joyas en si no nos tapan el camino, ya que por muchas que quitemos siempre aparecen más. Lo más importante es que al destruir algunas joyas, se creará un camino por el que hemos de desplazar el flujo de aire y llevarlo hasta una meta situada en alguna parte.
Los escenarios son totalmente variados, y no siempre habrá grandes zonas de joyas, a veces habrá algunos corredores en los que el flujo apenas se detendrá, ya que aunque esté el recorrido así el camino estará completamente despejado. Sin embargo, no siempre será así, a veces hay algunos bloques que son imposibles de destruir, y que necesitamos unos activadores con una (o varias) flecha/s para destruir esas paredes y así poder proseguir.

Algunos de los mayores estorbos lo conforman las joyas heladas, ya que al juntar 3 joyas se quitará el hielo, pero la piedra no desparecerá y claro está, no se formará ningún camino, hará falta destruir la joya por segunda vez para que el flujo pueda pasar. También existen piedras, que no pueden ser tomadas con el ratón y que solo desaparecerán haciendo explotar joyas. En caso contrario, tal vez un rodeo pueda ser la solución.

Al completar los niveles, veremos en un libro algunos elementos que tienen relación con el hada con el que estamos. El texto de la página se va colocando y la imagen va tomando forma hasta que aparece lo que estamos “rescatando”. Una vez con los cuatro niveles superados, aparecerá un nuevo puzzle para nosotros.
Para cada hada hay cuatro cosas a descubrir, y los puzzles son algo variados. Por un lado pueden pedirnos buscar una cantidad de objetos que aparecen en pantalla, o bien desmontarán la página en cuadros como si fuera un puzzle desmontado y nos pedirán que lo reordenemos. E incluso podemos toparnos con un “busca las diferencias”, enseñando dos veces la misma imagen pero con unas sutiles diferencian que en una imagen aparece y en la otra no.

Al ir avanzando niveles comprenderemos que hay tres tipos de subpuzzles con los que nos encontraremos (esto mientras seguimos eliminando joyas). Uno de ellos lo forma un tubo de cierto tamaño que está despiezado y girado en posiciones incorrectas. No hay que mover las casillas, sino tan solo girarlas, pero en algunos tubos largos nos llegará un rato descubrir la posición correcta, y como hay tiempo de por medio hay que hacerlo rápido.

El segundo es bastante simplón, únicamente hay unas circunferencias concéntricas que tienen unos trozos de tubos y que debemos girar para formar el camino a seguir. Es bastante sencillo y no lleva casi tiempo colocarlas bien, aunque a veces el juego nos deja una opción de ir por un lado u otro, pudiendo o ser más fácil/difícil, o simplemente una mera decisión sin más.
El tercer subpuzzle lo conforma una zona de tipo (generalmente) rectangular, en la que hay un conjunto de piezas que podemos mover a voluntad, que pueden ser cuadrados, “L” o ladrillos sueltos. Optimizando el espacio tenemos que ser capaces de permitir un pasadizo para que el flujo lo atraviese.

En este último caso en ocasiones el juego dará varias rutas posibles, así si por lo que sea la parte de la zona con piezas nos resulta difícil para nosotros, podremos tomar la ruta compuesta por joyas normales y corrientes, aunque por lo general son más lentas (estarán llenas de piedras, de joyas congeladas, o simplemente pasos estrechos que son siempre más difíciles de combinar).

Pero no todo iba a ser malo en este juego, y es que gozaremos de cuatro bonificaciones que se irán desbloqueando al ir superando los niveles. Son cuatro objetos que se pueden utilizar una vez que hayamos destruido suficientes gemas de su color, y que nos garantizarán un buen salvavidas para algunos casos muy concretos.
En primer lugar, las joyas verdes nos ofrecerán la “pala”, un objeto que destruye una casilla de tierra (no así la joya que esté ahí) para poder abrir algún paso estrecho. Esto es francamente útil ya que en algunas ocasiones las zonas son tan estrechas que pueda resultar imposible juntar 3 joyas del mismo color.

Las joyas de color rojo nos beneficiarán con una potente llama, capaz de destruir todo lo que haya en una pequeña zona. Si bien no afecta a la tierra en si, las joyas serán destruidas sin más, así como también ocurre con las piedras neutrales y con las joyas congeladas. Un buen incentivo para evitar tener que juntar las mismas joyas varias veces o, en el caso de no poder seguir, eliminar algunas de esas joyas y que, con suerte, las que aparezcan en su lugar si nos sirvan.

Las joyas de color amarillo nos ofrecen una bonificación bien curiosa. Es la de intercambio, y su cometido es la de intercambiar 2 joyas de posición, sin importar donde estén o lo lejos que estén. Tan solo hay algunas que no puedan cambiarse, tales como las piedras o joyas congeladas. Pero en algunos callejones en los que tenemos 2 joyas de color rojo, bastará cambiar alguna de las pegadas a estas por cualquiera de color rojo en cualquier parte del escenario para abrir la brecha que tanta falta nos hacía.
Para terminar, las joyas azules/moradas (en algunos niveles tendrán un color y en otros el otro) su utensilio es el reinicio del tablero, es decir, cogerá todas las joyas en pantalla y las recolocará aleatoriamente. Una vez más, piedras y joyas congeladas permanecerán en su sitio. Si bien es un objeto que emplea más la suerte, tiene un buen uso, y es que si vemos que hay muchas joyas de algún color, aunque situada en una zona que nos da un poco igual, al utilizar este reiniciador tal vez coloque todas esas joyas en alguna zona mucho mejor para destruir y seguir nuestro camino.

Hay que añadir que, en el caso de no poder continuar encadenando joyas, el juego hará un reinicio del tablero automáticamente. De por si no es mala señal ya que no pasa nada porque lo haga varias veces, así que no tendremos problema si eso pase, salvo quizás el tiempo que podamos perder mientras hace este efecto.

Si hemos conseguido liberar a las cuatro hadas, y superar los muchísimos niveles que el juego tiene preparado para nosotros, desbloquearemos un modo desafío. Este modo nos presenta un puñado de niveles nuevos que si bien no parecen añadir nada nuevo, nos encontraremos que el tiempo para poder superarlo es muy corto, ganándose su fama de desafío, al menos en un principio.
En definitiva, estamos ante un juego entretenido, que entre las “búsquedas” en las pantallas de las hadas, los minijuegos que hay al rescatar las páginas del libro y los subpuzzles que hay entre medias hace que este juego no sea tan monotemático, añadiéndole algo de diversidad para así no sentirnos abrumados ante el juego en si.

RESUMEN:

Juego: 4 Elements II

Género: Puzzles varios.

Pros: No solo es el género de combinar piedras, también hay de búsqueda, tubos, crear camino de piedras, buscar las diferencias... Es bastante entretenido superar los niveles, al menos hasta cierto punto. Si nos quedamos con ganas de más, contamos con una serie de desafios que son mucho más difíciles que los niveles normales. En las pantallas a veces hay varios caminos, si se nos da mal una parte, optaremos por la otra solución, así que no hay excusa para no terminarse el juego.

Contras: Los niveles finales se hacen un poco cuesta arriba, más que por la dificultad, es porque algunas zonas hace falta estar limpiando joyas en otra parte porque estamos medio atascados.

miércoles, 25 de enero de 2012

TEENAGE MUTANT HERO TURTLES

¿Quién no conoce a esos héroes mutantes verdes maestras de las artes de combate? Pues este juego es el “Teenage mutante hero turtles”, para MSX, un juego a golpe limpio algo sencillito y resultón pero no por ello nada aburrido o sin sentido. Si bien las tortugas debieran ser “ninjas” y no “hero”, es cosa de la censura, pero son las tortugas ninja de toda la vida.
Ya antes tan siquiera de empezar, aparecer “Shredder” y nos pide un código. Este código pertenece al sistema anticopia del juego, desconozco que ocurre si erramos varias veces el código correcto, pero seguro nada bueno (aunque el juego si parezca iniciarse).

Una vez esperado a que nuestro archienemigo termine de amenazarnos y de contarnos sus malvados planes, aparecerá la pantalla de configuración, en la que redefiniremos las teclas y/o elegir si queremos jugar con teclado o alguna clase de Jockstick.

Iniciamos la acción, y nos pide elegir a una de las cuatro ya tan conocidas tortugas. Todas ellas se controlan exactamente igual, y todas ellas tienen las mismas habilidades, manejo, velocidad y demás, así que simplemente elegiremos a nuestra favorita, aunque claro está, que podemos cambiar siempre que queramos durante la partida.
Lo primero que se puede ver es una buena zona que se ve desde el aire. Si bien la falta de gráficos claros hace que sepamos quienes somos nosotros tan solo por el color, es bastante simple identificar donde hay alcantarillas, enemigos caminantes y bulldozers que intentarán destruirnos.

Una vez movido al personaje y colado en la alcantarilla, el juego se tornará en lo que es, un beat em up de 2 dimensiones en los que avanzaremos lateralmente, saltando y golpeando con el arma de la tortuga seleccionada a cuanto enemigo se nos aparezca por el camino.

Los enemigos son unas simples criaturas con patrones muy especificados, lo que no quita que no nos puedan dañar, y es que si nos tocan el juego hará un ruidito y la zona de bandas negras que hay alrededor parpadeará con un colorido arco iris que indica que estamos perdiendo vida con cada segundo.
Los enemigos los comprenden criaturas con patas que saltan verticalmente, hombres llama que caminan, ranas que saltan de aquí para allá, abejas y ovnis que vuelan a distintas velocidades... y mucho más. No hay un premio por matarlos, pero todo enemigo eliminado es un enemigo que no nos puede dañar, algo a tener en cuenta.

El juego no es tan lineal como pueda parecernos, si bien el camino siempre es el mismo, no hay un solo camino y algunos solo están para darnos rodeos o algún que otro callejón sin salida. Alargando el juego al menos si no conocemos el camino a primeras, cosa que para iniciarse está bien.

Si estamos en la zona correcta, encontraremos a un enemigo de gran calibre. Bien pudiera ser Rocksteady, uno de los villanos principales de la serie, pero esta criatura es de color morada y no aparece su compañero del alma, Bebop. Lo único cierto es que esta criatura lleva un arma de fuego (Que realmente no dispara) y que avanza continuamente hacia nosotros, sin detenerse y siendo el único enemigo que resiste varios impactos, así que puede considerarse como un jefe.
Tenemos ciertas clases de objetos que no coinciden con los que aparecen en el manual del juego. Si bien este nos enseña que hay porciones de pizza, medias pizzas y pizzas completas, lo cierto es que en el juego únicamente tenemos un dibujo de una porción de pizza, pero que nos recuperará nuestra salud al máximo.

Hay varios objetos más para usar, desde shurikens a boomerangs, ambas armas para usar contra los enemigos, pudiendo recogerlas con cualquiera de las 4 tortugas, aunque luego solo podemos usarlas con la misma tortuga que la había recogido inicialmente. Además de esto, otros utensilios como misiles, que se usan con la “tortu-furgoneta” para eliminar a los enemigos que se ven a vista de pájaro o eliminar barricadas que nos tapan la opción de avanzar.

Un objeto útil es la invencibilidad, al pulsar el botón de ataque nuestro personaje parpadeará y, durante unos breves instantes, no nos podrán alcanzar ni matar ni ninguna otra cosa. El último de los objetos útiles lo compone una cuerda, esto tiene un único uso, que es su utilización en una cornisa en lo alto de unos edificios. El juego colocará la cuerda automáticamente, al hacerlo podremos pasar de un edificio a otro sin morir cayendo al vacío.
El primer objetivo es rescatar a Abril O'Neil, retenida por un “jefe” que corresponde a uno que ya habíamos lidiado con él, solo que el escenario tiene otros enemigos y otra forma. Una vez liberada, nos contará el plan de “Shredder”, que consiste en destruir una presa e inundar así la ciudad, entonces apareceremos en otro escenario distinto, y nos colaremos en la primera y única fase que transcurre bajo el agua.

En este caso las tortugas no se diferencian más que en su energía o color, ya que no pueden atacar. Dentro del líquido elemento hay una serie de ordenadores que debemos desactivar (se sabe que lo están porque cambian de color). Habrá trampas de rayos que nos dañarán si pasamos cuando están activos, a lo que debemos sumarle el tiempo, y es que si permanecemos bajo el agua hasta que el tiempo llegue a cero, moriremos en el instante, no solo una tortuga, sino la partida completa, y nos tocará comenzar desde el principio.

A lo largo del juego, podemos cambiar cuantas veces queramos de tortuga, si una pierde su salud a cero será capturada y ya no podremos utilizarla. En teoría, una tortuga capturada se puede rescatar buscándola por alguna parte del escenario en algún nivel del juego. Esto no puedo asegurarlo debido a que al no ser un juego especialmente difícil, jamás me vi envuelto en esa situación.
A medida que prosigamos conoceremos algún que otro enemigo nuevo, pero principalmente un nuevo jefe, el propio tecnódromo. Este enemigo no es tan grande como podríamos esperar, pero es un tipo de problema distinto a todo lo conocido. Posee unos ataques nuevos y desconcertantes (distinto a lo que estamos acostumbrados, ya que ningún otro enemigo dispara nada), y solo tiene un punto débil.

Caminando caminando y avanzando por pantallas y los niveles, llegaremos hasta el auténtico enemigo final, este es el mismísimo Shredder, un rival con bastante aguante pero carente de inteligencia alguna, ya que simplemente se mueve rebotando por las paredes y rebotando en el techo, lo que sea lo más peligroso ya que no veremos demasiado bien por donde va a venir debido al tamaño del nivel.

Si bien no hablamos de un enemigo poderoso, puede ocasionarnos algún que otro problema, tiene bastante aguante y no se detendrá por mucho que le golpeemos, así que hay que observar donde como y cuando rebotará en las paredes, los muros y el techo, y situarnos de forma correcta para poder asestarle uno o dos golpes antes de alejarnos para que nos golpee él a nosotros.
Con Shredder derrotado, se nos sumarán puntuaciones, haremos Hi-score (o no) y habremos terminado el juego sin más (los puntos son algo irrelevante, ya que no hay ni vidas extras ni nada que se le parezca). Felicidades y ya solo nos resta volver a jugar desde el principio otra vez más.


RESUMEN:

Juego: Teenage Mutant Hero Turtles

Género: Plataformas & Beat em up.

Pros: Las tan conocidas cuatro tortugas ninja. Los niveles no son tan lineales como pueda parecer, hay zonas sin salidas, rodeos, y unos escenarios por los que podemos interactuar por los distintos edificios buscando alguna soga para poder continuar. Los cuatro personajes son protagonistas, y aunque no queramos, por la obtección de los objetos nos veremos obligados a usarlos a todos por igual.

Contras: Pese a que en las instrucciones del juego vienen indicados ciertos objetos, no así aparecen en el juego. Debido a esto último, es realmente dificil que nos maten a alguna tortuga, ya que al poder cambiar cuando queramos no es fácil dejar morir a alguno de los personajes.

viernes, 20 de enero de 2012

AFTER THE WAR

Esta entrada va dedicada a dos juegos en uno, se llama “After the war”, de Dinamic, es un juego de MSX que no tiene nada que ver con el “After the war” moderno (juego que al parecer, no tiene nada que ver con este). He dicho que son dos juegos en uno por una razón, y es que tenemos una cara A y una cara B, por ello son dos juegos diferentes.
La cara A nos presente un Beat em up. Es bastante simple, pero es difícil y requiere de buena habilidad. Simplemente contamos con nuestros puños y nuestras piernas para derribar a las oleadas de enemigos que van a aparecer.

Nada más empezar veremos a nuestro personaje, tras avanzar un poco caminando con las teclas pertinentes, aparecerá nuestro primer enemigo, un humano musculoso que avanzará hacia nosotros y con el que tendremos un intercambio de puñetazos, aunque nosotros tenemos a nuestro favor las patadas, que llegan más lejos, ellos poseen combos de puñetazos mortales que nos harán perder puntos de vida.

Por su lado, ellos tan solo tienen un punto de vida, así que cualquier puñetazo o patada los eliminará de nuestro camino. Sin embargo, no va a ser siempre así, ya que llegado a la mitad del primer nivel, tendrán dos puntos de vida, aunque es cierto que no tenemos combos, no son tan necesarios, ya que cualquier golpe que les demos los empujarán para atrás dándonos un buen espacio para poder maniobrar y, con suficiente habilidad, asestar un segundo golpe.
Estos musculosos hombres no son nuestros únicos enemigos, otros lanzarán dinamita que vendrán del fondo del escenario. Este potente explosivo nos matará una vida sin importar cuanta salud tuviéramos en ese momento, y es por esto que debemos evitar a toda costa este peligro.

Hay energía, exactamente 7 puntos de energía, pero no debemos pensar que eso nos va a proporcionar total seguridad, ya que los enemigos tienen poderosos combos que pueden quitarnos 3 o 4 puntos de salud en pocos instantes. No siempre será así, pero cuanto menos arriesguemos mejor.

Tenemos un total de cinco vidas, cosa que puede parecer mucho pero no lo es tanto, ya que es bastante fácil morir, con tan solo una dinamita o el enemigo que nos golpeen con un combo de 3 o más golpes y perder media vida en pocos segundos. Y hablando de segundos, tenemos también un corto espacio de tiempo para superar el juego, un total de 2 minutos y medio, lo cual es un tiempo realmente ridículo, y es que superando los niveles más o menos rápido, al morir tendremos que repetir el nivel al completo y, cuando queramos darnos cuenta, se nos habrá agotado el crono.
Al finalizar el primer nivel aparecerá un jefe poderoso, un hombre de varios metros de altura al cual parece que los golpes y las patadas comunes no le hacen ningún efecto. Él, en cambio, nos agarrará con un brazo y nos propinará varios golpes mermando notablemente nuestros puntos de salud, hará falta saber su punto débil y atacar en los momentos adecuados.

El segundo nivel es igual al anterior, solo que cambia el escenario, y se añade un nuevo tipo de enemigo. Un Punky que aparece por la parte izquierda y del cual solo podemos defendernos a codazos. Si bien ya conoceremos a este enemigo cerca del final del nivel uno, tan solo lo hará a modo de presentación, ya que en este nivel dos, además de necesitar más golpes, también llevarán un arma.

Su arma es una pistola de munición simple, basta con agacharnos para esquivar su balazo, y luego retroceder poco a poco para darle un codazo y con ello desarmarlo, pero eso no lo hace menos peligroso, porque sigue teniendo sus puños y siguen siendo enemigos que pueden agarrarte y sacudirte hasta eliminarte.
Con respecto a esto, el juego es un poco tosco a la hora de la reacción de los controles. En alguna que otra ocasión el juego tiene un poco de retraso desde pulsar el botón de puñetazo hasta darlo, y esto se va a notar mucho cuando un mero retraso nos cueste varios puntos de salud.

Tan solo son tres niveles que superar, con un jefe que se repite al final de cada uno, pero claro está, los enemigos cada vez son más duros (al final hará falta cuatro impactos para acabar con cualquiera de ellos), los punkys además de duros serán más numerosos, y es más, los jefes si bien son los mismos cada vez son más inteligentes, pudiendo encontrarnos que bloquea nuestros ataques o añade algún nuevo golpe mortal a su repertorio.

Sin duda alguna, este es un juego tremendamente difícil, solo apto para aquellos que gusten de los desafíos. Terminar el juego nos dará puntos y una satisfacción personal, pero aún hay más, se nos concederá el código para poder jugar a su segunda parte.
La cara B del juego nos presenta lo que sería la continuación o segunda parte del juego. Le hemos dado un descanso a nuestros puños y patadas para armarnos con una ametralladora de gran calibre y rápido disparo. Así mismo, nuestros musculosos y punkys enemigos son sustituidos por máquinas con armamento mucho más sofisticado.

Para empezar, nuestra ametralladora tiene una disponibilidad absoluta, primero porque nunca se le acaba la munición, y segundo porque podemos dirigir el arma a 180º, cubriendo toda la pantalla totalmente, sin poder disparar al suelo cosa que no necesitamos para nada.

Los primeros enemigos en aparecer son unos robots cargados con un cañón que nos van a sobrevolar, dando algunas pasadas y disparando alguna que otra bala y una bomba. Para esquivar las balas poseemos una tecla de agacharnos que, si pulsamos a la vez que presionamos una tecla de dirección, nuestro personaje adoptará una postura de “protección” que hará que las balas lo atraviesen (a veces se ve como impactan, pero no nos quitarán vida).
Por otro lado, la bomba es mucho más peligrosa, si bien es fácil de evitar, ni siquiera la pose evita que nos golpee, y es como la dinamita de la primera parte del juego: Una bomba, y una vida entera muerta.

La cantidad de puntos de salud en este juego está en otra medida bien distinta, tenemos una buena barra de salud que irá bajando muy lentamente con los disparos, así que recibir una, dos o incluso media docena de disparos no significa que ya estemos por morir. Aún con esto tampoco conviene tirarse de cabeza, debido a que hay enemigos que disparan rápidamente.

Otros enemigos que podemos encontrarnos los forman unas torretas que aparecen desde el techo, estáticas pero molestas. Unos Cyborgs que aparecen por delante o detrás y disparando ráfagas de proyectiles contra nosotros.
Si bien la salud es bastante, esta vez contamos con tan solo 3 vidas, aunque es más difícil morir por las balas, las bombas nos siguen eliminando con la misma facilidad que ocurría en la primera parte. Por otro parte, el tiempo aunque limitado es un poco más extenso, dándonos tiempo de terminar el juego incluso perdiendo alguna que otra vida.

Al igual que ocurría con la primera parte del juego, aquí también hay jefes, aunque en este caso son un poco más diferenciados visualmente. El primero de ellos es una máquina de buen tamaño que, parada en un sitio, disparará unos misiles con un estallido mortal para nosotros. De nuevo, solo disparando en cierta parte en concreto veremos su vida mermada, y mientras esquivar los misiles que, de alcanzarnos, nos matará una vida sin importar la salud que tengamos.

Al superar el primer nivel, los enemigos irán cambiando, aunque algunos de los anteriores se mantendrán, y el jefe del segundo nivel es parecido pero se nota una gran diferencia, y es que posee un cañón tripulado por un hombre que dispara balas. Claro está, ya no solo esquivamos misiles sino también balas.
El tercer y último nivel presenta unas máquinas variantes del jefe pero mucho más pequeñas y menos resistentes, aunque sus balas están disparadas a mala leche así que habrá que poner a prueba nuestro ingenio para salir de esa. Claro está que a estas altura no hay bombas como tal, pero todos nuestros enemigos nos dispararán proyectiles con mayor rapidez, pudiendo matarnos como no tengamos cuidado.

Si derrotamos al jefe del tercer nivel (el cual es, obviamente, aún más peligroso que los anteriores) habremos terminado el juego, con la felicitación de rigor y la satisfacción de haber terminado un juego de buena dificultad.

Lo mejor que tiene este juego, es el ser dos en uno, y ser completamente distintos, ya que el beat em up requiere de golpes precisos el shooter es un juego algo más rápido y dinámico que el primero, pero también es más complicado de dominar, ya que en uno apenas tenemos 2 botones y 3 acciones, mientras que con la ametralladora a cuestas son 180º y una serie de botones principales para esquivar, algo que no será fácil de dominar correctamente.
NOTA: Para poder jugar la cara B de este juego, se nos pide un código que solo se consigue superando la cara A o, lo que es lo mismo, la parte beat em up del juego. El código es 11423.


RESUMEN:

Juego: After the war

Género: Beat em up & Shooter

Pros: Dos juegos en uno. No son dificiles de aprender a manejar. Un juego corto pero dificil, tanto que eso alargará el tiempo de juego (para ambos juegos). Dos estilos muy diferenciados, que tienen realmente tan poco en común que podrían no pertenecer al mismo.

Contras: En el beat em up los movimientos a veces son algo toscos, lentos y torpes. En ambos juegos, para saber como luchar contra el jefe correctamente, hemos de morir unas cuantas vidas (y morir implica empezar el nivel desde cero).

domingo, 15 de enero de 2012

JAMESTOWN: LEGEND OF THE LOST COLONY

Dejando de lado un poco los juegos de los 80, voy a hablar de un juego, de estilo antiguo pero completamente moderno. Es un puro mata marcianos llamado “Jamestown: Legend of the lost colony”, con todo el dinamismo y diversión de los mata marcianos clásicos en un juego moderno.
El primer y único modo de juego que aparece es el tutorial, en él se explica los botones básicos, algo importante ya que si bien no hay gran diferencia con grandes juegos mata marcianos, viene bien conocer los botones principales para sacarle el máximo partido.

Básicamente, el juego puede ser jugado con un ratón o con un teclado, o incluso ambos a la vez con dos jugadores. Incluso si conectamos otro ratón y/u otro teclado podemos añadir hasta un máximo de 4 jugadores, lo que vuelve el juego en totalmente hilarante.

Una vez listo para empezar, veremos un mapa de lo que lo que vendría a ser el juego. Lo único que podemos hacer es jugar el nivel primero, dejándonos elegir entre cinco niveles de dificultad, el más fácil de ellos es el “normal”, y de ahí tenemos niveles como “difícil”, “legendario”, “divino” y “juicio”.
Siendo la primera vez es recomendable empezar al nivel normal, aunque si somos jugadores experimentados podemos empezar con algún nivel superior, recomendando el “Legendario” por una razón de peso. Esta razón es que en el nivel normal del juego únicamente estarán disponibles los 3 primeros niveles del juego, y no nos dejarán jugar al cuarto hasta que no hayamos superado esos tres niveles en el nivel “difícil”.

Lo mismo ocurre con el 5º y último nivel del juego, al superar los 4 niveles en el nivel difícil, el juego nos pedirá que lo hagamos en el “legendario” para así tener acceso a ese 5º nivel. Incluso sabiendo esto es más que convienen jugarlos todos, ya no solo por el dinero que se puede conseguir, sino porque así se alarga el juego y eso es bueno.

Con el juego en si, y pudiendo elegir tan solo un tipo de nave (las otras hay que comprarlas con dinero que se consigue jugando), tenemos a nuestro particular “avión” con 2 tipos de disparos. En el caso de esta primera nave el primer de los disparos es uno muy débil pero que abarca mucha pantalla, ideal para barrer la pantalla de esas decenas de molestos enemigos menores que inundan el juego.
El segundo disparo es mucho más concentrado, abarca muy poca zona pero es mucho más potente, aunque también seremos un poco más lentos mientra lo disparamos. En cualquier caso, estos dos disparos son infinitos, y siempre vendrá bien utilizar uno o el otro, según la zona.

Los enemigos destruidos sueltan tuercas de distintos tamaños, normalmente los enemigos más débiles son más pequeñas y los más resistentes grandes. Esto aparte de puntos llenará una barrita que tenemos en la parte superior de la pantalla. Con la barra completamente llena tenemos la opción de activar un escudo protector que nos recubrirá y protegerá de todos los enemigos y sus proyectiles. A los primeros somos inmune, y los segundos simplemente los destruye, aunque esto no dura más que unos pocos segundos puede ser un auténtico salvavidas.

Esto no se termina aquí, en cuanto la duración de esta protección se acabe, el disparo de nuestro personaje cambiará de color, y la barra situada en la parte superior comienza a descender. Durante la duración de esta (que se puede alargar recogiendo más tuercas), nuestras balas son más potentes y hacen daños considerables. Una vez más, en la duración de esto, tenemos la opción de volver a pulsar el botón del escudo, aunque esta vez el escudo es mucho menor tamaño pero de nuevo somos inmunes a todos y claro está, no ganaremos ciertos puntos aunque eso es secundario.
Al llegar a cierto punto, el aviso de un jefe final aparecerá, y entraremos en un combate contra un enemigo de gran tamaño y que disparará por todas partes con el fin de destruirnos a la par que devolvemos el fuego. Este jefe tiene una barra de salud muy bien identificada, y estará dividida en porciones según el jefe, esto significa que atacará con ciertos ataques y con cierta gama de proyectiles y repetirá el patrón. Al llevar al destruir una de esas porciones, el jefe comenzará a disparar usando otro patrón de ataque distinto y, por lo general, más difícil.

Cada nivel se juega independientemente, contando con 2 vidas y dos créditos para cada uno. Esto para los niveles principales puede resultarnos sencillo, pero el juego cuenta con un modo “guante” que es para jugar los 5 niveles seguidos con esas 2 vidas y 2 créditos, teniendo un buen reto entre manos. Hay que contar que solo en el nivel 3º de dificultad el juego nos permitirá jugar los 5 niveles, ya que si ponemos uno menor la partida concluye antes de tiempo.
Jugando partidas, superando niveles y matando a los enemigos logrando puntos ganaremos dinero para usar en la tienda, en ella se puede comprar principalmente las otras naves (cada una es bastante distinta del resto), y unos packs de desafíos de los más variados y que le añaden algo fresco al juego, estos desafíos si bien no parecen gran cosa, al ir superando los primeros y toparnos con los siguientes veremos que su definición de desafío se la han ganado.

Estos desafíos son algo variados, sus objetivos pueden ser de ponernos delante una cantidad desorbitada de enemigos que disparan, si cabe, aún más proyectiles, y pedirnos sobrevivir durante 15 segundos. O bien pedirnos una puntuación prevista y plantarnos un nivel con unos enemigos predeterminados (que pueden ser o no los mismos que salgan en el nivel que les corresponderían, aunque lo normal es que su orden de aparecer y comportarse sea única para el desafío). En estos niveles de puntuación, no basta con matar y recolectar todo, hay enemigos que al destruirlos en X momento sueltan más tuercas, a añadir utilizar nuestra bomba prematuramente, ya que en lo que dure ese estado poderoso ganamos aún más puntos.
Aparte de esos niveles especiales, en la tienda se puede comprar algunos “apuntes” a mayores para la historia del juego, y algún que otro modo Hardcore que solo funciona con más de un jugador. Y claro está, no todo puede simplemente comprarse, ya que no podremos hacernos con el tercer pack de desafíos si antes no hemos superado un mínimo del uno y del dos.

Y si estamos pensando que el nivel es demasiado fácil, allá están los niveles a mayores que el juego trae. Si bien en el nivel normal el número de proyectiles es bastante escaso y nos recuerden a juegos sencillitos y facilotes, al empezar a jugar niveles a mayores la cantidad de proyectiles y la velocidad de estos aumentarán de forma considerable, convirtiendo un juego adorable en un auténtico infierno en donde usaremos la bomba cada 2 por 3 para poder salvar la vida.

Un curioso detalle, es que el juego cuenta con 5 niveles de dificultad, esto que ya he mencionado anteriormente, el jugador nunca podrá adivinar, hasta que lo juegue, la diferencia que estos traen, llegando a ser el último de ellos una auténtica exageración digna de super-jugones de esos que vemos en youtube.
La razón de decirlo así, es que si probamos a jugar el primer nivel del juego al nivel “normal”, los primeros enemigos solo se moverán. En el nivel “difícil” uno de cada 20 enemigos disparará alguna bala lenta. En el nivel “leyenda” uno de cada 10 enemigos nos disparará 2 balas de mayor velocidad. En el nivel “divino” uno de cada 3 enemigos dispara 3 balas más rápidas.

Hasta ahora, todo ha ido progresivamente, de cero hasta tres balas, de disparar muy pocos a disparar muchos más. Desgraciadamente (o afortunadamente), el nivel “juicio” está 10 pasos más lejos. Cada uno de los enemigos del principio dispara la friolera de 9 balas, disparándolas en abanico, y añadiendo algo nuevo: La bala verde.

En este juego, los enemigos tienen distintos ataques, pero en sus formas principales son proyectiles de colores azul y rojo. En este nivel “juicio” se añade el color verde para algunas de sus balas. Esto no es un mero color más, y es que esta nueva munición enmascara un peligro mucho mayor, y es que si utilizamos nuestro “Vault” a forma de escudo, ni las balas ni los enemigos nos dañarán excepto estas nuevas balas verdes, que atravesará nuestro escudo como si no lo hubiéramos usado.
Este tipo de ataque solo está en este nivel “juicio”, habiendo enemigos que disparan auténticas hileras y en donde el jefe final también hace un buen y gran uso de este mortífero arma, así que ya no solo tenemos que enfrentarnos a una gran cantidad de balas que poblarán la pantalla, sino que además, los escudos no nos servirán para defendernos de todo, algo a tener muy en cuenta.


RESUMEN:

Juego: Jamestown: Legend of the lost colony

Género: Matamarcianos

Pros: Es muy rápido y muy entretenido de jugar. Distintas naves, cada una con sus pros y sus contras. En el nivel "normal" del juego los jugadores más novatos lo encontrarán a su justa medida, y los jugadores más "Hardcore" encontrarán en niveles superiores un juego digno de ellos. Poder jugar hasta 4 jugadores simultáneamente. Los desafíos, algunos son fáciles pero otros muy complicados, que pondrán a prueba nuestros reflejos y nuestra pericia.

Contras: Si queremos jugar a más jugadores, necesitamos otros periféricos a mayores, como otro ratón u otro teclado.

martes, 10 de enero de 2012

HARVEY SMITH SHOW JUMPER

Para esta ocasión hablaré de un juego cuanto menos curioso, y es que, ¿Qué se puede pensar de un juego llamado “Harvey Smith Show Jumper”? Pues que nos encontramos frente a un juego de hípica, tan simple como curioso pero que da para mucho juego (y es de MSX).
En este juego de hípica hay un menú básico por el que se navega pulsando las teclas indicadas de verde, siendo unas cuantas. En el caso de simple y llanamente querer jugar, bastará con pulsar la “P” y jugaremos el circuito por defecto seleccionado con un jugador sin más.

El sistema de juego es simple, pulsando los botones de dirección moveremos nuestro querido jamelgo, el cual cabalgará según la velocidad que le indiquemos dándole varios toques al control. Pero cabe destacar que la aceleración del caballo tan solo se verá cuando se haga horizontalmente y no así verticalmente, la razón de esto es que las vallas que estén colocadas en el terreno estarán en horizontal.
Claro está, no se debe pensar en ir a toda velocidad, ya que por según que zonas habrá que parar, frenar, variar el rumbo, o simplemente que si bien a más velocidad hay más opciones de saltar la valla en si, también hace que sea más difícil calcular y que, si las vallas están juntas entre si, no podamos saltarlas ya que a tal velocidad tiraremos alguna.

En cuanto al orden de cómo superar el nivel, vendrá indicado en un pequeño mapa con indicaciones de la dirección que debemos tomar así como nuestra posición. Es importante indicar que la competición (y el arranque del crono) comenzará al pasar por la salida indicada con una “S”, esto que pueda parecer una chorrada no lo es tanto, y es que si bien el circuito por defecto la salida está a mano, en otros habrá que recorrer un poco del circuito antes de llegar a ella (huelga decir que en ese tiempo no solo el crono no suma segundos, sino que podemos atravesar los muros cual fantasma).
Si nos olvidamos de saltar o calculamos muy mal, el jinete se caerá al suelo, lo que nos costará ocho segundos de penalización. La segunda vez que pase (con la misma valla) simplemente la tiraremos abajo. Lo peor que puede pasar es saltar alguna valla que no nos corresponda, eso significará la descalificación inmediata de esa participación, algo importante a tener en cuenta.

Al superar todos los obstáculos y llegar a la meta, se contará el tiempo tardado y los fallos, y con todo se sumará dándonos una puntuación y saliendo, en el juego, tanto el nombre del caballo como del jinete que lo montaba, algo que si bien no guarda entre partidas (algo clásico de esta época), para una tarde de superación entre uno o más jugadores puede servir bastante.
Si ya nos hemos cansado del circuito y queremos ver más cosas del menú, existen varias que son importantes de revisar, a saber: Pulsando la tecla “S” cambiaremos de circuito, con un buen número de ellos a elegir, algunos son tan simples como una línea recta (o 2) y otros tan enrevesados con tantos giros que podemos terminar mareados.

Con la tecla “N” modificaremos el número de jugadores, y en el caso de la tecla “H” veremos los detalles de caballos y jinetes, pudiendo modificar sus nombres al que nos convenga o simplemente al que nos guste. Y lo que es más importante, la tecla “E” y “C”, que sirven para poder usar el editor del juego y crear nuestros propios circuitos a gusto del consumidor, pudiendo decidir la ruta, el número de vallas y el tipo de estas.

No existen demasiadas limitaciones en este editor y, por mencionar alguna, debe existir como es natural una salida, una meta, y estar interconectadas entre ellas con un único camino, no pudiendo haber varios caminos ni trozos sueltos que no lleven a ningún lugar, aunque si que se permiten cruces tanto cruces perpendiculares como meros giros para según que casos.
Habrá que tener en cuenta, que si seleccionamos más de un jugador para jugar, al terminar de hacer el circuito y aplausos pertinentes, saldrá unas indicaciones del nombre del corcel y del jinete, pero a menos que pulsemos la “P” de “Play” para que le toque al siguiente jugador y su caballo, ya que en caso de pulsar la “M” para volver al menú principal no podrán jugar el resto de jugadores.

Si bien el juego carece de auténticos objetivos, al no poseer rivales, ni CPU, ni marcas a superar, todo se queda en el mero hecho de intentar superar todos los obstáculos que se nos planta en el camino sin tirarlos o tan solo tirar los mínimos posibles, cosa no siempre fácil y es que, incluso en circuitos fáciles, los movimientos algo bruscos de pantalla no siempre ayudan a poder saltarlos correctamente.
Por suerte son 18 circuitos distintos, así que si el reto que nos proponemos es el de no tirar las vallas puede llevarnos bastante tiempo, ya que no es tarea demasiado fácil. Claro está, no están los circuitos ordenados por dificultad, así el número 3 es mucho más difícil y enrevesado que el número 4. Sumando que podemos hacer nuestros propios circuitos a nuestro gusto tenemos una cantidad infinita de circuitos disponibles.


RESUMEN:

Juego: Harvey Smith Show Jumper

Género: Hípica

Pros: Muchos circuitos y muy editable. Muchos jugadores jugando por turnos. La velocidad y la habilidad primarán para lograr los mejores tiempos.

Contras: Falta de objetivos, rivales IA o desafios.

jueves, 5 de enero de 2012

WORMS CRAZY GOLF

Inicio el año con un juego tan curioso como gracioso como nuevo como conocido, este es el Worms Crazy Golf ¿Acaso se esperaba esta combinación? Pues así es este juego, Worms Golf, que aúna el estilo de juego del Worms (principalmente el Worms Reloaded) con un juego de Golf bastante interesante aunque tenga algún fallo principal.
Lo primero y más natural, es crearse un usuario, con el que jugaremos toda una serie de hoyos con un estilo similar al del resto de los juego de golf (número de golpes, par, etc)

Tal y como estamos acostumbrados al estilo del Worms, apuntaremos bien con las flechas o bien con el ratón (se puede especificar en el menú de usuario) hacia que punto queremos disparar. Todo se ve en 2 dimensiones, así que únicamente apuntaremos hacia arriba o hacia abajo, y pulsaremos nuestro botón de disparo para golpear la pelota.
A la hora de golpear la pelota, contamos con un total de cuatro palos diferenciados. Uno viene a ser una madera: que se reconoce porque es el, por lo general, el palo con el que dar el primer golpe, ya que posee mucha potencia. El siguiente es el hierro, un palo que no abarca tanta distancia como la madera, pero que es capaz de disparar con mayor parábola. El siguiente es la cuña, un palo que tiene poca potencia y cuya mayor utilidad es para colocar la bola dentro del green. Finalmente el último palo es el “Putter” un palo diseñado para empujar la bola a ras del suelo para meter la bola dentro del hoyo.

En la parte inferior se puede ver una barra con la potencia para la hora de golpear. Esta barra está compuesto por una gran zona de verde oscuro, aparte hay 2 franjas de pequeño tamaño rojas, y entre estas otra zona un poco más grande de color verde más clarito. En cuanto empecemos a pulsar el botón de disparo y, dejándolo pulsado, la barra empezará a llenarse de izquierda a derecha, empezando por la primera gran zona verde, luego pasará por la zona roja, luego la verde claro y finalmente la otra roja, a menos que dejemos de pulsar el botón en cuyo caso se detendrá antes.
El juego posee una guía de hacia donde irá la bola, esta guía hará caso del golpe en el caso de llenar la gran zona verde al máximo. Si paramos en la 2º zona verde, el golpe será más potente y saldrá un “excelente” por la pantalla, esto viene bien en el caso de las maderas y según que golpes. Si por desgracia hemos parado en alguna de las dos franjas rojas, el golpe será penalizado, por lo que nuestro golpe será bastante flojo avanzando un trocito tan pequeño que ni merece la pena mencionar.

El objetivo del juego es conseguir meter la pelota en el hoyo (como todo buen juego de Golf que se precie) en tantos o menos golpes del número PAR indicado en el juego, que puede ser desde 3 golpes a 5, dependiendo de la longitud y complejidad del nivel. Y aquí es donde entra en juego la diferencia con los golfs clásicos, y es que si bien el primero o primeros hoyos se asemejan a lo más simple, pronto empezaremos a ver escenarios con montañas, montacargas y otros obstáculos.
Uno de los obstáculos curiosos que veremos, es la aparición de otros Worms. No serán amigos ni enemigos ni neutrales, todo depende de la partida y su posición. Estos gusanos están parados, y simplemente se la pasan mirando aquí y allá sin moverse, pero que si son golpeados con la pelota, explotarán como el Worms de toda la vida. Su explosión puede empujar la bola, o hundirla en el hueco que se produce al desaparecer el Worms.

No se puede considerar enemigos o aliados por separado, ya que a veces están en zonas que nos ayudan a detener la bola para que no se nos cuele por donde no debe, pero otras veces empujarán la bola o hará que se vaya para una zona que no queramos, por eso hay que tener cuidado con estos “personajes”.
Hay otra clase de obstáculos que pueden interferir con el juego, tales como murciélagos, ancianas (propias del Worms) o las tan conocidas ovejas que pueden explotar impulsando la bola a grandes distancias. Aparte de eso, montañas y algunos montacargas y zonas de “transporte” que solo a través de nuestra propia experiencia podremos conocer que son y que hacen.

Cada cierta cantidad de campos habrá alguna clase de desafío que pueden ser de varios tipos, desde mantener la bola en el aire lo máximo posible (utilizando cañones, murciélagos y explosiones de ovejas), intentar que caiga la pelota lo más cerca del green, o golpear ciertos objetos o dianas desde distintas alturas.

Al conseguir superar estos retos, aparte de ganar monedas que sirvan para la tienda, también ganaremos ciertas habilidades a mayores, tales como ralentizar el tiempo, invertir la gravedad o darle un impulso extra a la pelota como si fuera impulsada por un escopetazo (al más puro estilo Worms).
Estos objetos, si bien le añaden algo extra al juego, por desgracia es un contra muy grande, y es que algunos objetos, como por ejemplo el de invertir la gravedad, aún teniendo un límite de tiempo de uso, es bastante fácil lograr un hoyo en uno o tal vez en dos golpes, lo que hace que los campos pasen de tener cierta dificultad o cierto reto para superarlos sin ninguna complicación (es recomendado no usarlos).

Al superar los 18 hoyos, habremos terminado un “mundo”, existen 3 más para jugar y disfrutar con otros 18 hoyos cada uno, así que tenemos juego para rato, y juego para conseguir algunas monedas extras (que por cierto también se encuentran dentro de los campos).
Las monedas que se consiguen durante los retos y los propios campos sirven para desbloquear los muchos objetos que podemos encontrarnos en el juego. Algunos son meramente decorativos, tales como gorras para equipar a nuestros gusanos para que “vayan a la última” y otro es auditivo, ya que podemos comprar distintas clases de voces bastante típicas que de haber jugado a juegos Worms conoceremos de sobra.

Lo que si se puede comprar con más utilidad son los palos de golf, si bien no se añaden ninguno nuevo, podemos modificar los 4 que ya teníamos, y con ello cambiar las estadísticas, es decir, un nuevo palo madera que tenga mayor potencia que el que teníamos, o tal vez mayor control, claro está, que todos tienen ciertas estadísticas y, si una de las tres la tienen muy aumentada, las otras dos serán más bajas.

Esto es muy importante, ya que con mayor potencia más lejos llegaremos, pero si tiene menos control la barra subirá más rápido y las zonas rojas serán más grandes, lo que significa que si bien llegaremos más lejos y mejor con nuestros golpes, también es más posible que la pifiemos. En caso contrario, con un gran control será tremendamente fácil alcanzar el máximo de potencia, pero a cambio nuestros golpes no tendrán apenas fuerza y puede costarnos más de dos golpes llegar a una zona cercana al green cuando antes en apenas 1 ya estábamos.
Todo lo mencionado anteriormente puede ser utilizado con más de un jugador, es decir, jugar a cuatro jugadores en donde no importa tanto quedar bajo la cifra marcada para el campo, sino superar a los otros jugadores controlados por humanos. No hay intermisiones entre los jugadores sino que se turnan para golpear la pelota, fuera de eso el juego es totalmente igual al modo en solitario.


RESUMEN:

Juego: Worms Crazy Golf

Género: Golf al puro estilo Worms

Pros: Los campos son extraños, raros pero entretenidos de jugar. Muchas opciones para editar, tanto visuales como dentro del juego. Algunos desafíos para descansar al jugar varios hoyos seguidos y lograr nuevos objetos. Jugar multijugador. El humor hilarante que desprende el juego, sobretodo en el apartado de gorros y de idiomas.

Contras: Los objetos a mayores que aparecen en el juego hacen que sea excesivamente de superar los campos, conviene no utilizarlos.